Volvemos a las andadas, el pasado 26 y 27 de noviembre salimos de rutas con nuestros amigos, esta vez nos dirigimos dirección Camprodón, pero por unos nuevos caminos.
El sábado bien pronto nos encontramos y nuestras sonrisas ya deparan que se nos avecina unas jornadas de las que prometen, el viernes llovió con lo que el estado de los caminos estará inmejorable para nuestro disfrute.El buen tiempo nos acompaña y la primera parada es en Mieres, un buen desayuno y el reencuentro después del parón veraniego. Nos gusta la montaña, nos gustan nuestros Atv,pero también nos gusta la buena gastronomía.
Salimos dirección norte, donde nos espera la alta Garrotxa, el otoño es la estación que más bonitas deja nuestros bosques y disfrutamos de ello como niños pequeños, nos encontramos carreteras más o menos en buen estado, pero con nuestros vehículos no tuvimos dificultad más allá de vigilar las piedras que nos encontramos en el camino. Llegamos a Camprodon, una buena comida, unas buenas charlas y a descansar que esto no ha acabado
.El domingo nos despertamos con un día imponente, un buen desayuno y nos preparamos paraseguir ruta, ahora toca bajar, dejamos el Ripollés para volver hacia casa. Una vez mas los paisajes son espectaculares y las mecánicas funcionan a las mil maravillas, solo unos pinchazos nos hacen hacer paradas inesperadas, pero con ello también conversaciones de lo bien que lo estamos pasando.
Llegamos a la comida y es momento en que todas las anécdotas que nos han pasado este fin de semana salen a la mesa, es un no parar hablar de todas las vivencias ocurrida, también el cansancio empieza a notarse, nos empezamos a dispersar, cada uno va cogiendo el camino para su casa, la despedida es con una sonrisa en la cara de lo bien que no los hemos pasado y sin mas todos vamos llegando a nuestros hogares y ya esperamos la siguiente aventura.
